Practice: Lectio Divina
Lectio divina (Latin for sacred reading) is a contemplative way of reading, praying, and taking a long, loving look at Scripture or some other text. In lectio divina, God teaches us to listen for and seek God’s presence in silence. The text for this lectio practice is from my book The Universal Christ:
“A mature Christian sees Christ in everything and everyone else.” [1]
- With the first reading, allow yourself to settle in to the exercise and familiarize yourself with the words. Read the text out loud, very slowly and clearly. Pause for a breath or two before moving on.
- For the second reading, listen from a centered heart space and notice any word or phrase that stands out to you.
- After a few moments of silence, read the text a third time, reflecting on how this word or phrase is connected to your current life experience. Take a minute to linger over this word or phrase, to focus on it until it engages your body, your heart, your awareness of the physical [and unseen] world around you.
You may want to speak a response aloud or write something in your journal.
- For the final reading, respond with a prayer or expression of what you have experienced, inviting the infinite wisdom of God to support you in places of unknowing, confusion, desire, or hope.
Leading in with the quotation below, practice a contemplative sit. You may wish to set a timer or digital prayer bell for 5, 10, or 20 minutes, so that you know when to finish.
Seat yourself in a quiet area. Once you are settled, read the passage aloud again:
“A mature Christian sees Christ in everything and everyone else.”
- Notice any tightness in your shoulders and neck and allow any tension in your muscles to relax.
- Allow your back to rest in an aligned, neutral position.
- Ground yourself and allow your breathing to settle. Then read the following aloud:
I am not trying to “achieve” anything. (Pause) There are no goals. (Pause) I am simply becoming aware of this moment. (Pause) Becoming aware of my presence in this moment. (Pause) As I notice any distractions, thoughts, judgments, decisions, ideas that cross my mind, I let them go for now (Pause), focusing instead on my moment-by-moment experience of being present to What Is. (Pause) God’s Presence. (Pause) The Larger Field. (Pause) En Cristo. (Pause) - Ring a prayer bell to indicate that the contemplative sit has begun.
Práctica: Lectio Divina
Lectio divina (en latín, lectura sagrada) es una forma contemplativa de leer, orar y de echar una mirada larga y amorosa a las Escrituras o algún otro texto. En la lectio divina, Dios nos enseña a escuchar y buscar la presencia de Dios en silencio. El texto para esta práctica de lectio es de mi libro The Universal Christ:
"Un cristiano maduro ve a Cristo en todo y en todos los demás". [1]
1. Con la primera lectura, permítase acostumbrarse al ejercicio y familiarizarse con las palabras. Lea el texto en voz alta, muy lenta y claramente. Haga una pausa para respirar un par de veces antes de continuar.
2. Para la segunda lectura, escuche desde el centro del corazón y observe cualquier palabra o frase que le llame la atención.
3. Después de unos momentos de silencio, lea el texto por tercera vez, reflexionando sobre cómo esta palabra o frase está conectada con su experiencia de vida actual. Tómese un minuto para detenerse en esta palabra o frase, para enfocarse en ella hasta que involucre su cuerpo, su corazón, su conciencia del mundo físico [e invisible] que lo rodea.
Es posible que desee dar una respuesta en voz alta o escribir algo en su diario.
4. Para la lectura final, responda con una oración o expresión de lo que ha experimentado, invitando a la infinita sabiduría de Dios para que lo apoye en lugares de desconocimiento, confusión, deseo o esperanza.
Comenzando con la cita a continuación, practique una sentada contemplativa. Es posible que desee configurar un temporizador o una campana de oración digital durante 5, 10 o 20 minutos, para saber cuándo terminar.
Siéntese en un área tranquila. Una vez que se haya asentado, vuelva a leer el pasaje en voz alta:
"Un cristiano maduro ve a Cristo en todo y en todos los demás".
• Observe cualquier tensión en sus hombros y cuello y permita que se relaje cualquier tensión en sus músculos.
• Permita que su espalda descanse en una posición alineada y neutral.
• Conéctese a tierra y permita que su respiración se calme. Luego lea lo siguiente en voz alta:
No estoy tratando de "lograr" nada. (Pausa) No hay metas. (Pausa) Simplemente me estoy dando cuenta de este momento. (Pausa) Tomando conciencia de mi presencia en este momento. (Pausa) Cuando noto distracciones, pensamientos, juicios, decisiones, ideas que pasan por mi mente, las dejo ir por ahora (Pausa), enfocándome en cambio en mi experiencia momento a momento de estar presente en Lo que Es. (Pausa) Presencia de Dios. (Pausa) El campo más grande. (Pausa) En Cristo. (Pausa)
• Toque una campana de oración para indicar que ha comenzado la sentada contemplativa.